Caro Diario x María Lebone
¡Hola! Soy María, compañera de profesión de las Handrich y amante de València, el barrio de Ruzafa, el sol y el vermouth.
Cuando Marta me propuso escribir para el blog me encantó la idea, y no sé si os descubriré algo, pero allá van mis descubrimientos.
Este año he decidido que una vez al mes voy a hacerme un regalo, y ojo porque no tiene que ser material. Puede ser un ratito al sol o un paseo por la playa. Pero aquí os dejo lo que para mí, hasta ahora, me ha funcionado y solo estamos a Marzo. ¡Ganas de ver qué traerá el resto del año!
Enero, la cuesta de enero, el Blue Monday y el “este año cumplo 30”.
El día 1 de enero yo ya tenía claro que tenía que hacer algo para sentirme mejor, para verme en el espejo y decir: “tía, estás hot”. ¿Pero cómo iba a hacer eso si mi báscula marcaba 5 kg más de lo que yo quería reconocer? – Pues ya está, regalo de enero. ¿Dietas? – Hell, no, la tortilla no me la quita nadie-
Mi pasión, el ballet -(de siempre he sido bailarina wannabe).
Hace años descubrí un entrenamiento de Ballet Fitness que se llama Ballet Beautiful que me vuelve loca y que no podía permitirme. Lo primero, porque la profesora Mary Helen Bowers tiene su escuela en Nueva York y segundo porque los vídeos que ponían en youtube eran cortos y desorganizados.
PERO, debido a la pandemia, habilitaron cursos online en streaming y… ¡a un súper precio! 20€ al mes y tienes entrenamiento 7 días a la semana (si quieres) – yo hago 3 o 4 días, según me de.
Os digo, me ha cambiado la vida y me siento fuerte y grácil como una bailarina – suerte que lo hago en casa y sin espejo, así que no sé cuán grácil debo parecer haciéndolo pero me encanta. Os recomiendo invertir en un ratito para vosotrxs, aunque de pereza al principio. Porque… te sientes tan bien luego. Y más con trabajos como los nuestros. Agencia, comunicación, redes, shootings… estrésssss.
FEBRERO, ¿Acaso sé yo cocinar?
Ese plato tiene historia para nosotros porque en nuestra primera cita cenamos pasta al ragú que él cocinó. No sabéis lo rica que estaba… ¿Y acaso se yo cocinar? Mmmm más bien no. Me sacas del arroz de vasito microondas y me haces una desgraciada. PERO, PERO cómo es la vida, ¿eh?
Resulta que he descubierto (o las cookies de Instagram empiezan a dar miedo) LA mejor pasta de València y no es un Uber Eats que te la traen ya hecha a casa, no. Es una
empresa pequeña que hace la pasta casera el día que tú la pides y te la envía a casa sin cocer con la salsa aparte, para que tú solo tengas que cocer la pasta (con sus maravillosas indicaciones) y la salsa y Mamma Mia… es como estar en Italia. Nada parecido en València so far.
La empresa se llama Il Mercato della Pasta, lo encontraréis en Instagram. Tienen su carta en los highlights y es solo elegir, contactar y hervir la pasta.
Por San Valentín hicieron un menú de Orechiette al Ragú con lo que fue mi menú San Valentín. Por supuesto, la intención es lo que cuenta y mi chico terminó la pasta conmigo.
MARZO, Deme una de SHA
Este mes ha empezado muy estresadito. Fashion Weeks, campañas Primavera -Verano. Y claro, es que no es lo mismo ser la celebrity o la modelo, que ser la que pinta la estrategia. La que se pelea todo el rato con la repre de la celebrity, la que está en medio entre cliente y proveedores, la que, la que. (Menos mal que tengo un equipo maravilloso).
Así que este mes seguro, segurísimo, me voy a un spa. Y obviamente, no puedo hacerme un SHA Retreat porque, ¿qué me creo yo embajadora de marca acaso?. Pero voy a intentar desconectar 3 días en mi Spa favorito del mundo AIRE. Está en Barcelona y es una maravilla. Son unas termas romanas con luz tenue donde desde el momento en el que te enrollas en el albornoz, flotas.
Mientras tanto, también os digo, que me escaparé al Tyris de Reino de Valencia a que me den un masaje de 30 minutos y un circuito termal de una hora por 45€ porque yo ya estoy enganchada y estamos a día 3, :D.
Ironías de la vida. Igual sí que empiezo a notar la sombra de los 30…
M